Faltan 13 días para el verano y el centro de Texas ha tenido que soportar dos ola de calor que ejercen presión adicional sobre los sistemas domésticos de aire acondicionado.
Tim Burleson, gerente de operaciones de los servicios de plomería y aire acondicionado Radiant, dice que el calor extremo eleva el riesgo de falla del equipo: "Una vez que empieza a subir de 105, no se puede esperar que la temperatura interior sea mucho más que 20 a 30 grados de la exterior. Es un reto para el sistema y no se puede esperar que rinda mucho más".
Burleson dice que existen algunos pasos para evitar que su unidad se dañe mientras trabaja horas extras:
- Cierre las persianas y cortinas del lado de la casa que recibe luz solar.
- No utilice electrodomésticos como hornos, planchas y secadoras durante el día porque calientan el interior y hacen trabajar la unidad más tiempo.
- Fije el termostato entre 76 a 78 grados.
“Esto le dará a su aire un descanso donde se puede apagar y volver a encender cuando lo necesita", dijo Burleson.
Rolisber Cabrera es un trabajador de mantenimiento y dice que estas sugerencias no siempre se siguen en zonas residénciale: "Creo que mayormente por mi experiencia de mantenimiento y por los lugares que he trabajado se mantiene a una temperatura de 72, 71, y algunas veces 73".
Juana Enríquez, quien reside en el norte de Austin, está entre quienes mantienen el termostato a 71 o 72 grados.
"Si tratas de bajarlo a más de eso, lo puede hacer funcionar por mucho tiempo, lo que va a acortar la vida del sistema", dijo Burleson.
Si su aire acondicionado no está enfriando como debe, es posible que tenga poco refrigerante. Esta es la época del año en que la presión adicional del calor puede causar fugas mayores.
Fuente: www.telemundoaustin.com